Anteriormente, te hablamos de 6 beneficios de un sistema donde te contamos todas las ventajas que contar con un sistema trae a las empresas. Queremos acompañarte en este proceso de crecimiento a través de esta herramienta, por eso hoy te hablamos de los 4 pasos que debes dar para elegir al mejor sistema para tu negocio. ¡Toma nota!
- Define tus necesidades: es primordial saber qué pretendes con un sistema de gestión. Anota en una lista qué informaciones necesitas y qué quieres consultar regularmente en el mismo. También analiza qué procesos y actividades cotidianas quieres mejorar y qué datos necesitas que estén actualizados de manera constante. De tu lista, selecciona las tres más importantes y empieza a buscar opciones de sistemas que respondan a esas necesidades, así reducirás los candidatos considerablemente.
- Observa las funcionalidades: Cuando ya tengas las necesidades de tu negocio definidas y el sistema candidato, presta atención a sus funcionalidades, es decir, qué puedes hacer con el sistema. Es importante que no te quedes sólo con las soluciones que un sistema promete sino que las compruebes, así que de ser necesario pide la asesoría de algún profesional. También existen sistemas que ofrecen demostraciones gratuitas, lo cual te facilitará en gran medida este punto.
- Considera la implementación: Es importante que sepas qué es necesario para implementar el sistema de tu interés. ¿Se requiere de equipos costosos? ¿Va a interferir con el trabajo diario? ¿Es necesario contratar algún servicio adicional para la implementación? ¿Se requerirá de capacitación? ¿Por cuánto tiempo? ¿Cualquiera puede utilizarlo o se requieren conocimientos avanzados? Todas estas cuestiones deben ser respondidas y evaluadas para seleccionar la mejor opción.
- Establece un presupuesto es necesario realizar una inversión, siempre dentro de las posibilidades de la empresa. Por ello, fija un presupuesto y elige la opción que represente el mejor costo-beneficio.
Una vez implementado el sistema, es primordial mantenerlo actualizado para poder observar sus beneficios en tu negocio. Ahora es hora de poner estos pasos en práctica y recuerda que la tecnología ya facilita tu vida diaria y dejar que también facilite el trabajo en tu negocio puede hacer toda la diferencia.
